Losing a father

Debo remarcar el hecho de que tuve que escribir esto momentos después de estar riendo y bailando por allí, porque de otra manera me era imposible. Lo sé, juro que lo intenté.

 

Para aquellos que no lo sepan perdí… no, espera. ¿Porqué parece que no podemos decirlo? Carajo, mi abuelo murió, no lo perdí entre la multitud del tianguis el domingo y definitivamente no lo encontraré si voy a la sección de objetos perdidos en el metro, no sé porque usamos el eufemismo de “perder”, sí, es cierto que ya no está, pero creo que sólo minimiza el impacto de las cosas. En fin, como iba diciendo, mi abuelo murió a finales de septiembre. Algunos ya lo sabrán, otros llegan tarde a la fiesta, pero la verdad es que más que mi abuelo para mi era mi padre. Viví con él prácticamente toda mi vida, y ha sido la única figura paterna que he tenido en mi vida.

 

Las cosas pasaron muy rápido, un día se puso mal, lo internamos y lo siguiente que sé es que el doctor está allí, del otro lado de la cama en una habitación color salmón diciéndome que no hay más que hacer y que somos afortunados si dura cinco días mientras yo sostengo su mano que, quizá por la noticia, quizá por el aire acondicionado, ya sentía un poco fría. Bam.

 

No es lo que uno cree. Nunca es nada lo que uno cree ¿No es cierto? Al menos no estoy destrozada… quiero decir, por supuesto que me duele, y por supuesto que I bailed my eyes out durante el velorio y desde el momento en que nos enteramos de que llegaríamos a esto. Pero no estoy… destrozada en términos de no-quiero-comer-sólo-quiero-dormir. A veces encuentras el modo de sonreír un poco, y hay días, aunque los menos, en que consigues reír a todo pulmón. Sí, siempre va a estar ahí esa sensación de que algo falta, de que algo está fuera de lugar… pero sobrevives.

 

A veces estoy entumecida, y apenas y me entero de que siento algo, como si hubiera pasado muchos años atrás. Otros días parece que todo sucedió ayer. Lo que es cierto en ambos casos es que las imágenes del último día jamás saldrán de mi memoria y me acosan día sí y día también. Es todo un infierno, pero no estoy segura de que me gustaría que hubiera sido de otro modo.

 

Lo más difícil es, creo, seguir con la rutina luego de que no está. La muerte de alguien tan cercano es un parteaguas en tu propia vida por muchas razones, pero la más palpable es cuando dejas de entumecerte a ti mismo y ya no puedes esconderte detrás de preparativos, detrás de colocar sillas, cambiar cirios o preparar café para los invitados. Cuando todo el ceremonial termina ya solo quedas tú en una casa que parece mucho más grande sin su presencia, con una familia que no parece la tuya porque es demasiado cortés, como volver en el tiempo y recordar algo que no tuviste tiempo de presenciar del todo: Alguna vez fueron una familia.

 

Volver a la rutina es lo que te rompe en pedacitos porque todo parece lo mismo y a la vez tan diferente. Vuelves a la Facultad como de costumbre, pero respondes mil preguntas sobre porqué te ausentaste a personas que te sorprenden demostrando que les importa o te hacen lamentar haber dicho algo. Poner atención es un esfuerzo sobre humano, aunque la mayor parte de las veces en realidad es un buen modo de ignorar la realidad, y entonces te sorprendes sacando dieces cuando esperabas que todo se fuera a la mierda. Conforme pasan los días se vuelve peor, al menos al principio. Se vuelve más obvio que ya no está, y las más pequeñas de las idioteces —como ponerte los audífonos, despedirte para ir a la escuela o que el profe mencione una película en específico— hace que tus ojos se llenen de lágrimas. Las canciones y las películas tampoco ayudan, pero el absceso normalmente pasa y vuelves a ser tú.

 

También tienes esta culpa por casi todo lo que haces. Por sonreír, por escuchar música, por dejar el luto, por mirar la tele, por salir con tus amigos, por asistir a esa premiere para la que ya tenías boletos… y por muchas cosas que no hiciste también. Al menos en mi caso sé que soy una buena persona, con todo y mis errores, y lo peor de lo que me arrepiento (aunque me mata) es haber ido a la Facultad en vez de quedarme con él en su último cumpleaños. Hay otras cosas, como haberme ido a Huatulco una semana después de su muerte, pero ya hablaré de eso en otra ocasión. La cosa es que la culpa es horrible y te persigue, pero eventualmente sencillamente te aguantas. Suck it up, darling.

En lo personal se que voy a extrañar tus bromas, tus risas, y tus ojitos verdes. El tono de tu voz, si alguna vez deja de sonar en el fondo de mi memoria. Sé que no voy a dejar de llorarte pronto, o quizá nunca, y que voy a tratar de seguir tu ejemplo, de conseguir que donde sea que estés, estés orgulloso de quien soy, y de que lleve tu apellido, aunque sé que tan exigente eres para dar tu aprobación. Gracias por haber estado allí, por consolarme antes de irte y por todo, todo lo que fuiste. Te quiero muchísimo, papacito. Hasta siempre, Papá Raúl.

En fin.

Cosas como esta ponen a prueba todo tu mundo, son una prueba para aquellos que dicen que les importas, y es una prueba para ti, como persona y como miembro de una familia. De cierto modo ayuda a conseguir pizarra en blanco, aunque no es la forma más encantadora de conseguirla ¿A que sí? Y definitivamente ya no eres la misma después de esto, como si una parte de ti hubiera muerto con esa persona.  Pero la verdad es que yo sigo aquí, y tengo que seguir con mi vida como pueda. El reto es grande, no sólo se va él sino que se lleva consigo toda la seguridad con la que contaba y oh, me aterra el momento en que todo se vaya (más) al carajo, pero tendré que salir adelante de todos modos, y qué más da. Gané algunos amigos, otros pocos me recordaron que siempre han estado ahí, y otros, los más, demostraron que quizá no son del todo mis amigos, pero como he aprendido a lo largo de los años nunca está de más saberlo. Duele, pero la incertidumbre duele todavía más.

Gone



I miss you, miss you so bad
I don't forget you, oh it's so sad
I hope you can hear me
I remember it clearly
The day you slipped away
Was the day I found it won't be the same

I didn't get around to kiss you
Goodbye on the hand
I wish that I could see you again
I know that I can't
I had my wake up
Won't you wake up?
I keep asking why
And I can't take it
It wasn't fake
It happened, you passed by
Now you are gone, now you are gone
There you go, there you go
Somewhere I can't bring you back
 
Now you are gone, now you are gone
There you go, there you go,
Somewhere you're not coming back
The day you slipped away
Was the day I found it won't be the same no..
The day you slipped away
Was the day that I found it won't be the same oh...
I miss you


Breaking the Habit by Linkin Park on Grooveshark  
No pedí una oportunidad por salir a escondidas con alguien, ni siquiera porque Kaizen trata de ello, y sin embargo apareció. Apareció y la tomé y me di cuenta de que no sabía nada, de que es mucho más complejo de lo que imaginé. Pero sí, salí con alguien por el placer a hacerlo, por el peligro, por experimentar. Era mi propio juego personal, un bálsamo si quieren, imprudencia disfrazada de investigación científica. 

Pero resulta que hasta cuando yo estoy jugando salgo perdiendo. 

¿Triste? No, no estoy triste. Estoy enojada, conmigo al menos. Aunque a pesar de todos mis esfuerzos jamás dejó de ser un juego, sé que jamás debió haber empezado. No puedo creer que me convenciera a mi misma de que romper con mi sistema de valores por pasar un buen rato valía la pena. Era obvio que no es así. Fue una experiencia, y hasta llegó a ser divertido, pero dejar de ser quien soy por dos o tres ideas para mi novela que no se me habrían ocurrido de otro modo… 

Resulta un precio demasiado alto por mercancía usada.

Valium

Terrible Love by The National on Grooveshark A veces siento como si flotara, con la marea llevándome de un lado al otro rítmicamente, a veces no sé porqué me duele si soy feliz, a veces no sé quién me duele, o si es que duele en realidad. Me despierto pensando en que las cosas no van bien, y, a veces, duermo pensando en todo lo que va bien.

 

A veces siento que hemos vuelto a lo mismo de antes, de siempre, a mi soledad y mis gritos ahogados… antes tenía porqué sentirme sola, hoy tengo tantas personas que de verdad me aprecian, aunque sean volubles y obstinadas y su depresión a veces me hunda más en la mía… y entonces no sé porqué me siento sola.

 

Quizá debería gritar en vez de esperar a que me escuchen, pero es que hasta para gritar soy rara, y qué. Si de verdad estuviera gritando ya me abrían escuchado ¿Verdad? Quizá sólo soy yo y este maldito estrés. O quizá es verdad que no importo tanto como yo pensaba, y si es así… no, no quiero escucharlo. No me importa saberlo mientras no tenga que escucharlo.

 

Quizá así es la vida, pero no la aguanto.
No, no la aguanto. Pero tampoco quiero que deje de girar. Si esto es estar viva entonces no quiero que pare.

¡Al fin, vacaciones!

 

De verdad no puedo creer que nadie me dijera que la universidad podía ser tan condenadamente difícil y divertida al mismo tiempo.
El semestre me está costando mucho, aunque ya me acostumbré a la carga de trabajo, en parte es porque no me hacen muy feliz todas las materias. Relaciones Internacionales de 1815 a 1945 (¿No adoran los cortos nombres de las materias que llevo?) me gusta por la temática, pero la maestra está cerca de hacerme odiarla. No sé, odio que se ponga a hablar de películas que nadie a visto y luego diga ‘los que la vieron me entenderán’, como toda explicación. Y Desarrollo económico, político y social de México I es básicamente historia de México y no sé como me siento respecto a ello. Es aburrido en el sentido de que es otra vez la misma historia (que vienes escuchando desde la primaria), excepto que nunca es la misma historia. En fin, a ver qué tal nos va. Por otro lado Economía Política Internacional es al mismo tiempo la más condenadamente exigente y la que más me está gustando. Duermo a las cuatro de la mañana por su culpa pero no me interesa, aprendes tantas cosas que las quejas pierden sentido. Derecho Constitucional con éste profesor está resultando la cosa más interesante del mundo. Metodología es literalmente más de lo mismo, pero no significa que me guste menos.

 

En realidad lo único que me preocupa es que soy un asco para hacer ensayos, y ¿Adivinen qué se hace en ciencias sociales? ¡Exacto, ensayos! Estoy considerando seriamente abrir un blog, como una especie de práctica, pero aún no sé. Si no escribo aquí no sé que me hace pensar que voy a tener tiempo para escribir en él…

 

Y el estrés es demasiado. Entre la escuela, y que mi abuelito ha estado enfermo…
Se cayó hace un mes y se fracturó la cadera. Ha estado en cama desde entonces. Supongo que se deprimió, porque si de por sí no quería comer mucho ahora de plano no comía nada. Hace como dos semanas lo llevamos al hospital, por eso y porque tenía muchas flemas. Salió la misma noche aunque le enviaron oxígeno durante tiempo indeterminado, pero por lo demás parece que está fuera de peligro, incluso platica más… No sé, aún así estoy asustada. Quienes realmente me conocen saben que es como un padre para mí, más que un abuelo. Siempre le he tenido un gran respeto y por lo mismo no tenemos una relación tan cercana como cualquier creería, pero tampoco somos distantes. Y lo adoro con locura. Me va a doler muchísimo cuando lo perdamos, y eso es lo que me tiene asustada.

 

En fin, la vida es complicada, pero todavía es buena. El lunes salí con mis amigos a jugar boliche y luego a dar una vuelta en Coyoacan. Nos divertimos mucho, aunque al final no pudiéramos ir todos. Tengo mucha tarea para las vacaciones, pero al menos me alegra no tener que salir a ninguna parte, y poder dormir. Estoy haciendo más amigos en éste semestre, ah, y puede que salga con alguien la semana que viene :P so… ya les contaré. 

Ô Mort…

 

Ô Mort, vieux capitaine, il est temps ! levons l'ancre !
Ce pays nous ennuie, ô Mort ! Appareillons !
Si le ciel et la mer sont noirs comme de l'encre,
Nos coeurs que tu connais sont remplis de rayons !

 


Verse-nous ton poison pour qu'il nous réconforte !
Nous voulons, tant ce feu nous brûle le cerveau,
Plonger au fond du gouffre, Enfer ou Ciel, qu'importe ?
Au fond de l'Inconnu pour trouver du nouveau !

Desenchufes

Hablé con Alejo y estoy podrida por dentro.

 

No, no así, y ese es justo el problema. Que no sentí nada, que tengo una jodida semana esperando sentir algo, lo que sea, pero no, nada. Y ojalá fuera de otro modo porque entonces ¿Qué queda de mi? He estado agonizando por lo que pasó entre nosotros, o lo que no pasó y pudo haber sido por tanto tiempo que ya no sé quién soy sin eso. Y se ha esfumado.

 

¿Quién coño soy ahora?