El arte de comprobar teorías

Me siento como deben sentirse los cajones cuando son vaciados, sin nada más dentro que pelusa, efímero recuerdo de aquello que los llenaba pero que en perspectiva resulta apenas basura. 

Lau cortó conmigo, ojalá supiera decirles por qué, y créanme: jamás me había sentido más hecha polvo en toda mi vida. Me la paso llorando, durmiendo sin descansar e inventando excusas para las ojeras y los ojos hinchados. (Porque hasta eso, lo malo de las relaciones así es que ni siquiera puedes sufrir a gusto.) Vaya, estoy tan hecha mierda que me siento patética sólo por haber permitido a alguien hacerme sentir así. 

Creo que estaba tan preocupada por hacerla feliz y por no hacer su vida más complicada de lo que ya es que me olvidé de exigir el mínimo. No quiero decir que no fui feliz, era divertido excepto cuando me hacía sentir poco importante, aunque era bastante a menudo. Pero hasta eso era mejor que esto.  

Si, me siento ridícula, robada, usada, y cuanto sinónimo se les ocurra, pero sobre todo estoy enojada conmigo misma por haber confiado demasiado en ella, aunque también duela decirlo así porque nunca creí que diría una frase como esa hablando de Laura. Confíe tanto en ella que dejé que jugara con las tres cosas que más me duelen y ella aceptó jugar con todas, con el fracaso, con el abandono y con el remplazo, porque la canción de ABBA de antes es de cuando estableció que hasta la perra cara de orco de Paula se merece más cariño que yo. 

Eso es lo que duele más, creo. Eso y comprobar la teoría de que al final la que no sirve para esto soy yo, que nunca voy a ser suficiente para nadie sin importar cuánto lo intente (¡Y mira si lo intenté!). Pero está bien, supongo, en tanto me acostumbre a vivir con ello. Al menos puedo dejar de tratar, porque es extenuante, especialmente si como en ésta ocasión soy la única pinches tratando... Bleh, quizá no es del todo cierto, quizá Lau también lo intentó, quizá sólo su definición de intentarlo y la mía son tan diferentes como las de relación. 

Quiero pensar que la estoy juzgando por lo último que me hizo como suelo hacer y no que soy lo suficientemente estúpida para haber dado el título de mejor amiga por algo menos de diez años a alguien que no me aprecia en absoluto, pero justo ahora no sabría decir con exactitud.

Sólo espero que ella sepa lo que está haciendo, porque yo no entiendo nada y si es la decisión más inteligente de su vida o la más estúpida, está enteramente en ella. 

Lo único que me alegra de todo esto es que al menos yo no falté a ninguna promesa. Dije que siempre estaría aquí y aquí estoy, rotita y algo humillada, pero aquí. Y al menos no soy yo la que le hizo daño porque todo apuntaba a que así sería, y no me lo habría perdonado nunca. Eso, y que aún si pese a lo que me la pasé diciendo justo ahora desearía haber sido cobarde porque habría sido mucho más fácil, la verdad es que no habría podido vivir conmigo si no lo hubiera intentado. 

La extraño y no saben cuánto, especialmente ahora porque ella era la primera persona con la que solía correr cuando alguien me hacía sentir así, pero me siento basura por hacerla sentir mal. Je, lo malo es que nadie se siente mal por hacerme sentir mal a mi... (Empezando por el hecho de que ni siquiera parece que quiera hablar conmigo) no sé...

No es mi persona favorita en el mundo justo ahora y no saber qué chingados no ayuda con ello. De verdad me gustaría haber recibido algo más que patrañas como motivo, porque sentimientos como los que dijo tener no nacen o se esfuman de un día para el otro, y "te estoy haciendo daño" sólo es una excusa patética. Perdón. (Vamos, a éstas alturas extraño sentirme cambiada. Al menos es mejor sentirte menos que alguien a que básicamente prefieran estar solos que contigo.) 

Pero tampoco la odio. Ha sido mi mejor amiga por tanto tiempo que no me imagino la vida sin ella... ya sólo sé que no sé nada, empezando por qué fue real y lo que no, y pues sí, duele muchísimo.  Por eso me siento tan así, porque lo de Lau me destruyó hasta los cimientos y no está nada padre no tener ni suelo que pisar... Supongo que ahora tendrá que venir la reconstrucción, en tanto deje de identificarme con lo que sienten las cucarachas cuando pasan encima de ellas luego de haberlas aplastado una vez... justo ahora tengo ganas de quedarme en el suelo sin importar que el mundo siga girando o deje de hacerlo. 

Pd: Siento que se cebara antes de que pudiera contártelo todo, Socs. 
---
Edit:

Si algo aprendí de todo esto es que a veces tiene uno que terminar con lo que sobrevive de lo viejo para poder tener buenos cimientos sobre los cuales construir lo nuevo.

Laura se enojó porque llamé perra cara de orco a Paula en mi post. Bueno, no soy sus padres para tener la culpa de sus genes y siempre he sido alguien que dice la verdad, ahora que si a ella no le importa el físico pues ya lo noté, y ese es precisamente lo que me molesta, que viéndose así le guste más ella. Lo de ser una perra se lo ha ganado a pulso tratando a Laura como su chancla cada que se le viene en gana, pero claro, con todo es ella la que se merece todo su cariño y su confianza y es de esas personas que te dan ganas de proteger porque es una gran persona de las que genuinamente no aceptan cumplidos... Bah. Yo los acepto porque sé lo que soy y lo que valgo. Y si les gusta, sino también. 

Casi doce años de amistad y de mi no tiene queja alguna, pero claro, qué va a importar si lo que parece gustarle es la mala vida. En fin, dicen que un roto para un descosido, y Laura podrá no saber cómo sentirse pero yo sí sé y esto es lo último que quiero saber de ella luego de lo que ya me hizo pasar. Meh, seguramente dejaríamos de fingir que somos mejores amigas tarde o temprano, hace mucho que dejamos de tener muchas cosas en común.

Afortunadamente ya tengo master en esto, ¿Por qué habría de importarme? Perder a alguien que no sabe apreciarte y que ultimadamente no quiere estar en tu vida, no me parece del todo una pérdida. Al contrario. ¿Que la voy a extrañar? Seguramente, porque con tantos años siempre habrá algo que me recuerde a ella, pero qué más da. Lo que más voy a extrañar es mi editora pero como literalmente no he escrito un carajo en años, supongo que tampoco puedo extrañarla mucho. Al menos aunque aun me siento estúpida, ya no estoy triste, solo muy, muy enojada.


Quédate con tu amiguita esperando que un día aprenda a apreciarte en serio y que tengas buena vida.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Firma mis Jeans desgastados (: